Dentro del grupo de los violinistas clásicos más famosos en primer lugar aparece el italiano
Niccolò Paganini. Fue un violinista, violista, guitarrista y compositor italiano que vivió
desde finales del siglo XVIII hasta mitad del XIX. Desarrolló su carrera sobre todo en Italia,
aunque en sus últimos años trabajó en París, Viena y Londres. Es considerado como el violinista
más virtuoso de todos los tiempos debido a la combinación del arte para la improvisación y su
excelente técnica. Empezó a
tocar el violín
de niño, pero cuando se encontraba en los últimos años de su adolescencia tuvo problemas con la
bebida y su carrera musical se vio frenada. Tres años más tarde una mujer de identidad anónima le
ayudó a volver a la senda del éxito, enseñándole a tocar la guitarra y también
el piano.
En 1801 compuso más de veinte obras y en 1805 se convirtió en el director musical de la corte de la
hermana de Napoleón, cargo que ocupó hasta 1813. Entonces decidió viajar por Italia, donde era
admirado por quienes le escuchaban. Decían que había vendido su alma al diablo, porque era
capaz de interpretar piezas complejas enteras con una sola cuerda con sorprendentes resultados.
Salió de Italia para dar conciertos en 1828, pero en 1834 abandonó la música debido a una
enfermedad. Falleció en 1840 por otro episodio de la misma. Tras de sí dejó 24 caprichos para
violín
solo, algunas sonatas y seis conciertos.
A los cuatro años del fallecimiento de Paganini nació en Pamplona el famoso
violinista Pablo Sarasate. Estudió música desde niño y a la temprana edad de siete años dio
su primer concierto de violín. Fue un estudioso del arte de dicho instrumento, llegando incluso a
trasladarse a Francia con la ayuda económica de la reina Isabel II. Abandonó sus estudios cuando
alcanzó gran éxito como ejecutante y su sutileza y refinada técnica le mantuvieron activo por
América y Europa durante toda su vida, hasta que falleció en Francia en 1908. Sus obras más
conocidas son Fantasía sobre Carmen de Bizet y Aires Gitanos.
Posteriores a estos, los grandes compositores cuya obra se desarrolla a lo largo
del siglo XX fueron, entre otros, Eugène Ysaÿe, Jascha Heifetz, Yehudi
Menuhin, Nathan Milstein, Mischa Elman, David Óistraj o Henryk
Szeryng.
Aunque tradicionalmente el éxito en el mundo del violín ha estado prácticamente
monopolizado por el género masculino, en la actualidad son muchas las mujeres violinistas
que gozan de amplio reconocimiento internacional, formando parte de la categoría de
violinistas famosos
actuales encabezada, posiblemente, por el armenio Samvel Yervinyan. El también compositor es
considerado actualmente como el mejor en su profesión.
La larga lista la componen, entre otros,
violinistas
como André Rieu, Itzhak Perlman, Vanesa Mae, Sayaka Katsuki, Joshua
Bell, Maxim Vengerov, Anne Sophie Mutter, Hilary Hahn, Sarah Chang,
Janine Jansen, Pinchas Zukerman, Karen Briggs, Shlomo Mintz,
Salvatore Accardo, Gil Shaham, Gidon Kremer, Akiko Suwanai, Vadim
Repin, Ann Marie Calhoun, Armen Movsessian, Armen Anassian, Kyung Wa
Chung, Antal Szalai, Uto Ughi, Zachary Carrettin, Giuliano
Carmignola, Shahrdad Rohani, Silvia Marcovici, Yang Liu, Olena
Vrubleska, Igor Gruppman, Shunsuke Sato o Jonathan Hill.